Piscina escolar

Gran piscina perteneciente a la escuela, alli se realizan clases de natacion, actualmente el puesto de profesor esta bacante...

El agua estaba fria. Apenas metido el dedo pulgar del pie derecho, un escalofrio la recorrio. Deberia estar acostumbrada pero...

Se sento en el borde hundiendo sus piernas, esbeltas, en el agua tratando de que su piel se acostumbrara a la temperatura.

Se sentia un poco ridicula. Llevaba el bañador que suelen lucir las niñas de primaria en los colegios. Su cuerpo seguia siendo el de una niña, sin apenas curvas ni nada provocativo.

Suspiro un poco disgustada. La verdad es que le gustaria ser un poco mas... voluptuosa. Pero como solia decir su hermano... no se podia tener todo en esta vida.

Mapa en una mano y bolsa de deportes en otra, ni corto ni perezoso había salido desde su habitación descalzo y con un bañador naranja que le llegaba hasta la rodilla. Seguro que alguien le habría mirado por el camino pero ¡que mas daba!

No podía quejarse de cuerpo el holandés, tenía las piernas musculadas y robustas gracias a la cantidad de deporte que hacia con ellas, como correr y el ciclismo. El resto de su cuerpo no se quedaba atras ya que de vez en cuando practicaba natación, y a eso iba ahora.

Se podría decir que Vincent era un as en el deporte, todo un ídolo que, gracias a su talento, pudo conseguir bastante respeto y popularidad en su tierra natal.

Tarareaba cualquier cosa sin sentido mientras caminaba y abrió la puerta, escuchandose un enorme eco de un chapoteo, genial, no estaba solo, suspiró molesto. Dirigió la mirada hacia el punto concreto y listo para mostrarse desagradable para echar a la gente, se encontró con una sorpresa.

-Pero...- Tuvo que echarse la mano a la nariz y darse la vuelta con una sonrisa de oreja a oreja. -No se a quien he rezado para que me pase esto, pero gracias.- Ya era hora de que la vida le diera una alegría recompensandole con una genuina loli.

Volvió a darse la vuelta hacia ella, con la sangre de la nariz limpiada y su... cara de poker, no había que mostrar rastro de emoción ninguna, pero era dificil, su piel era blanca como la misma nieve, incluso parecia suave, su rostro era demasiado inocente, no había desarrollado aun, genial, cada paso que daba era genial.

Dejó su bolsa de deporte en el suelo, a una distancia de dos metros de la joven, marcando presencia sin tratar de asustarla. -Buenas tardes.- En la vida se mostraría mas educado. -¿No se baña?- Se acercó al agua e introdujo una de las manos. -No esta demasiado fria... debe de tener unos 25º.-

La verdad es que no se habia dado cuenta de la puerta que se habia abierto. Ni de la melodia inconexa que el chico estaba tarareando. Solo se dio cuenta cuando se dirigio a ella y le volvio la mirada de grandes ojos verdes.

¿Tan absorta habia estado pensando en esas tonterias? Podria haberle pasado... algo, y ella ahi, quejandose mentalmente por tonterias sin sentido. Por eso mismo se sonrojo ligeramente, reprochandose ese tipo de cosas como seguramente haria su hermano mayor si estuviera alli.


- Ah.... Es que notaba el agua demasiado fria para mi...- Lily tenia una voz dulce. Vaya, tampoco habia crecido mucho en ese aspecto todavia

Cruzaron ambas miradas, sus ojos eran enormes y verdes, como un par de joyas incrustadas en su cara... esto se le iba de las manos. Ahora mas cerca se dio cuenta de mas detalles, como el sonrojo de su rostro o sus labios carmesí, besarlos en ese momento sería demasiado precipitado, pero lo peor fue al escucharla hablar.

¡Venga! Y para rematar la voz... alguien le quería muerto y le envió a esa niña para ello, o quizas se murió ya y simplemente ella era un angel del cielo... ¿donde estaban las malditas alas? y mas importante ¿que hacía él en el cielo?

Giró la cabeza al lado contrario en un ataque de tsunderismo. -Venga inutil, no tienes que poner cara de subnormal ahora diciendo: que mona~- Carraspeó un poco y volvió a poner cara de... de nada.

-El mejor consejo que puedo darte en estos casos es que olvides todo lo que sabes sobre... el frio y el calor y entres. Cuando estas dentro se está mucho mejor... incluso hay ocasiones que, aunque fuera haga mejor temperatura que dentro, cuando sales te da mas frío.- Terminado su "consejo, abrió la bolsa de deportes sacando una toalla.

La verdad es que aquel chico estaba siendo bastante agradable con ella, cosa que agradecia. Hacia apenas unas horas que habia llegado al nuevo instituto y no terminaba de encontrar su sitio en aquel lugar. Una mano amiga siempre se agradecia y seguramente su hermano se alegraria al saber que habia gente amable que la ayudaba a ir poco a poco adaptandose al nuevo entorno.

Asi que asintio, sonriente. Aquel chico parecia saber mas de esas cosas que ella, asi que no le iba a llevar la contraria en eso.

Puso todo su peso en el borde justo de la piscina. Las manos, pequeñas y delicadas como las de una muñeca de porcelana, se apoyaron en el borde para darse el impulso necesario para hundirse en el agua.

Lily se sumergio en el agua cristalina de la piscina y al cabo de unos instantes reaparecio. Su pelo rubio, mojado, se pegaba contra el rostro infantil al igual que su flequillo se pegaba sin reparos a su frente.

- La verdad es que tenias razon... Dentro no se esta tan mal- dijo cruzando los brazos encima del bordillo y sonriendo inocentemente.

Al ver como seguía su consejo, Vincent se puso en pie y caminó hacia el borde de la piscina, buscando una de las lineas verticales para hacer un par de largos... de momento encontró un sitio decente y se lanzó de cabeza sin pensarselo dos veces y no mirar más, por si acaso.

Dentro del agua braceó totalmente concentrado nadando de aqui para allá, aunque de momento tan solo dio un par de idas y vueltas, echaba de menos nadar y se quedó quieto en medio de la piscina, flotando boca arriba.

Pensandolo bien, no había tenido ni un maldito momento de paz desde que llegó. Que si le molestaban, que si proponia, que si... bah, mejor no pensarlo. Volvió a mirar a la joven. -¿Tu tambien eres nueva?.- Preguntó mientras flotaba boca arriba con facilidad.

Se quedo en el borde de la piscina mirandole. Vaya, el chico era muy buen nadador habia que darle ese punto a su favor. Sus brazadas eran largas y el movimiento de sus piernas armonico. Se notaba que debia de practicar ese deporte con bastante regularidad.

Lily le miro con algo de envidia desde su posicion segura del borde. No es que fuera mala nadadora, es solo que no practicaba ese deporte tanto como le gustaria.

- Llegue hoy mismo al instituto... Soy Lily Zwingli...

Buceó un poco hasta quedarse tambien en el borde de la piscina. Por estrategia supuso que lo le gustaria estar cerca por que intimidaba, asi que dejó un margen de distancia, pero si dejaba demasiada podía pensar que no tenía interes en conocerla asi que, en total, solo fue un metro entre ambos cuerpos.
-Yo soy Vincent der Keizer, llegué ayer.-

Siempre viene bien conocer a alumnos que estan, mas o menos, en la misma situación.
-¿Tu habitación tiene puerta? por que la mia no.- En fin, sacar ese tema como anécdota graciosa e iniciar una conversación no estaría mal.

- ¿No tiene puerta...? - le miro un poco sorprendida. - Pues... La verdad es que mi habitacion si que tenia puerta...

Se le empezaron a pasar varios motivos por los que cuales era posible que una habitacion no tuviera puerta porque... lo normal es que la tuviera ¿no?

- Sera que... las estan cambiando por viejas...?

Vale, era una tonteria pero... Era la idea menos absurda que se le habia pasado por la cabeza.

Alguna de sus ideas sobre la ausencia de la puerta incluia termitas y el sofocante calor del verano.

-Digamos que... no hay puerta por que llegué en mal momento... aunque si eso implica que la cambien por otra... bienvenida sea.- De momento no diría que un ruso loco tuvo una pelea y dejó la habitación hecha migas, lo que faltaba ahora es asustar a la chica.

Observó que en ningun momento se había soltado del borde, su bañador era como los que te daban en el colegio asi que su status social se podía intuir, o no tenia mucho dinero o su familia estaba llena de tacaños que no podian comprarla un adorable bañador de volantes rosas.

Con dicha imagen en la cabeza, miro al lado contrario y se tapó la nariz. Era normal la reacción cuando la veia correr hacia él con dicha prenda y lazos a juego en el pelo diciendo "Vincent Vincent ¿Te gusta como me queda?".

Aunque cuando tuviera la oportunidad, le compraría ese bañador.

-Siento si la pregunta es incómoda pero... ¿sabes nadar?- La profundidad de la piscina era bastante que incluso si Vincent se pusiera de pie, solo asomaría su cresta cual tiburón, una cresta que se le mantenía de momento.

- Entiendo.... Es logico que pongan otra puerta no...?

Lily se quedo un rato pensando en el misterio de la puerta. Apoyo ligeramente la barbilla sobre los brazos y sin saber muy bien porque se me imagino que haria su hermano mayor con el asunto de la puerta... Seguramente buscarla y ponerle muchos clavos para arreglarla mientras la decia que no se preocupara, que quedaria como nueva....

- ¿Ah...? - volvio nuevamente la mirada hacia el chico que la acompañaba- Bueno... Se nadar un poco aunque me temo que no tan bien como tu...

Nuevamente se sonrojo. Desde fuera la piscina no le habia parecido tan profunda y sentia un poco de inseguridad cada vez que pensaba en soltarse del comodo bordillo.

Vaya, un elogio. -La verdad es que es normal... cuando tengo un rato libre lo aprovecho para hacer cualquier tipo de deporte.- El holandés no era capaz de estarse quieto, pero ahora viene lo siguiente, eh, que por intentarlo no se iba a perder nada.-Bueno... quizas te parezca un atrevimiento pero tal vez pueda enseñarte.- Que dificil era retener al Vincent de siempre que buscaba la manera de tener contacto físico.

Lo normal es que de primeras no aceptara a bañarse con un tipejo que tenía pinta de violador, asi que, con resignación, se tumbó boca arriba en el agua y flotó nuevamente.

- Eso esta muy bien. - le sonrie abiertamente- Yo la verdad es que no hago mucho deporte...

Le gustaba nadar, pero casi nunca lo hacia. Asi que cuando supo que habia una piscina en el instituto decidio visitarla... Y alli estaba. Apoyada en el borde, temorosa por no saber nadar lo suficientemente bien.

Cuando le hizo la proposicion se le quedo mirando. Le conocia de cuanto? Unos minutos? De acuerdo que el chico se habia mostrado encantador con ella, eso tambien era cierto pero... Seguian siendo dos desconocidos, en mitad de una piscina desierta.

- No quiero hacerte perder el tiempo con esas cosas...

Pero una invitacion, es una invitacion y hay que ser cortes.

-Descuida, tengo demasiado tiempo libre y acostumbro a "perderlo".- A fumarse el tiempo, a pegarse con el tiempo, a hacerle proposiciones al tiempo...

En ocasiones, muy pocas, pensaba que el exceso de tiempo era mas bien deprimente por no tener con quien compartirlo. De todos modos los candidatos eran cuanto menos peor.

Mientras estaba ahi flotando pensaba en que sería una pareja muy rara, de momento le sacaría unas cuantas cabezas, tenía pinta de ser de primero, lo cual o llegaba a los 15 o era un poco mas joven que eso, la gente les miraría raro y le llamarían de todo a él, como acosador, pedófilo.

Pero lo mejor de las mujeres jóvenes es que aun no han tenido motivos para transformarse en unas zorras.

-Podemos coger un churro de esos que flotan, para ir empezando.-

De verdad se iba a dedicar a enseñarle a nadar? Seguramente aquel chico tenia cosas mas importantes que estar perdiendo el tiempo con una recien llegada a la que no conocia de nada....

En el fondo le dio un poco de pena decirle que no. Se le veia con ganas de intentarlo y aunque la situacion le parecia bastante curiosa esbozo una sonrisa agradable y divertida al mismo tiempo.

- ¡Claro!

Estaba claro que Vincent... No era un tipo normal y corriente.

Salió de la piscina un segundo y se sacudió el pelo... su cresta se estaba bajando, que desgracia.

Por algun lugar debería haber uno de esos churros de piscina pero no encontro nada, ademas de que, lógicamente, los armarios estaban cerrados.

Dejó las puertas que hacían entrar a la piscina abiertas, para que nadie pensara mal, de paso, dejó tanto su toalla como su bolsa de deportes algo mas alejada y volvio a asomarse, recorriendola por el borde.

-Lo mínimo de profundidad es 1.60...- Hiciera lo que hiciera, Lily no iba a dar pie ni de coña.

- ¿Que...?- miro un poco incredula al chico. 1.60... Vale... Ella apenas superaba el 1.55 de estatura...

De repente tuvo el presentimiento de que como se soltara del borde y no consiguiera nadar lo suficiente estaria en serios problemas.

Lily se recordo que la proxima vez que se metiera en una piscina... primero comprobara cuanto era la profundidad de la misma.

En fin... acabó por darle motivos para temer a la pequeña.

-No te preocupes, generalmente hay gente vigilando y si pasa algo iré en tu ayuda, no tengas miedo...- Menuda tontería acababa de soltar, si realmente era mejor ahogarse que acercarse al holandés...

Poco amor propio, poco amor en general... ¿para que tener algo en lo que no se cree?

Se sentó en el borde nuevamente, con las piernas en el agua, mirando hacia arriba, el techo era descubierto, debía ser genial bañarse cuando veias la lluvia rebotar en el cristal y pensabas en todos esos pringados pasando frio.

-Por curiosidad... eres de primer año ¿cierto?-

Alzo la mirada nuevamente hacia ese chico. Trago saliva, lentamente. Todavia estaba un poco intranquila con el asunto de la profunidad y todo eso... Sin embargo, despues de oirle se sintio un poco mas relajada.

- De acuerdo...- susurro en voz bajita.

Cuando le pregunto si era de primero bajo la mirada. Tenia los ojos fijos en sus blancos brazos cruzados encima del borde

- ¿Tanto se me nota que soy de primero...? - murmuro algo preocupada.

Llego enseguida a la piscina entrando con el bikini ya puesto pensando que había dejado suficiente tiempo a su compañera de habitación sola, desde que la había dicho que no sabia nadar se había quedado algo preocupada así que una vez terminado lo que estaba haciendo se puso el bikini tomo la toalla y salió rápidamente a la piscina.

Buscó a la niña con la mirada y sonrió al ver que estaba bien, dejó la toalla en el suelo y caminó hacia la piscina dándose cuenta de que estaba hablando con un chico.

Avanzó un poco mas para ver el rostro del chico.

-¿Vincent...?

-¿No estas feliz por ello?- La miró intrigado. -Ya les gustaría a muchas ser como tu.- Lolicon complex en tres... dos... uno... -Las chicas de primero son las mas guapas.- Lo dijo con una gran determinación que llegaba a asustar...

Gran metedura de pata, cambió de parecer enseguida.

-Quiero decir... que a medida que pasan los cursos se maquillan y acaban pareciendo lo que no es... con lo bien que se está sin nada de pote en la cara...- No lo estas arreglando... -Bah, olvidemos este asunto...-

Si, mejor era callarse para no decir que las chicas de primero eran sus favoritas, tenian su inocencia, su sonrisa luminosa y su virginidad, generalmente intacta.

No dijo nada mas y, dispuesto a lanzarse al agua escuchó su nombre pronunciado por una voz tan familiar...

Giró la cabeza en el borde de la piscina y ahi estaba la nota de la discordia, el único ser que lograría sacarle de sus casillas.
-De todos... todos los institutos que había por el mundo... por que no hay pocos... de todos... ¿¡TENÍAS QUE PARAR AL MISMO QUE YO!? ¿¡ME ESTAS PERSIGUIENDO O QUE!?- Con ambas manos a la cabeza, suspirando de vez en cuando. -¿Tu... tu tienes muchas ganas de fastidiarme esté donde esté o es simplemente que adoras ver mi cara?-

Se sonrojo bastante tras oir el comentario y enterro la cabeza entre sus brazos para evitar que el chico lo notara. Ese tipo de cosas no era algo que Lily escuchara muy habitualmente

- Gra-Gracias... Pero... Siempre pense que estaria mejor si fuera un poco mas... femenina...

Se sentia un poco violenta al hablar de esas cosas con un chico... Ni siquiera las habia hablado nunca con su hermano mayor...

Solo saco la cabeza de su segura guarida cuando escucho la voz de una chica.

- Hola Noah! - la saludo agitando el brazo desde la piscina.

Cuando vio la conversacion entre los dos se quedo un poco sorprendida

- ¿Os... conoceis...?

Sonrió y se acercó para palmear la cabeza del chico parecia haberse alegrado de verla.

-Tenía que ir al que fueras tu pero habría preferido que estuviera mas cerca de casa -se sentó al borde de la piscina cerca de él para que la otra no les escuchara- Es muy joven para ti y muy inocente, desiste.

Dicho esto se metió en el agua para abrazar a la niña.

-Siento haber tardado y... espero que mi hermanito no te haya molestado.

Y ahi estaba, ese grano del culo con lazo incorporado dispuesto a tirar todo su trabajo a la mierda.
-¡N-no me dejes en evidencia, maldita sea!- Lo que faltaba... ahora que podía alejarse de su familia, tenian que aparecer todas... que sería lo siguiente ¿Lux? -De vez en cuando puedo hablar con la gente con normalidad, asi que deja de juzgarme, malcriada.-

No es que la odiara, pero si la detestaba con todo su ser, siempre fue la niña buena, la ovejita tierna y blanca, la de las buenas notas, el orgullo de la familia y mira que mona es mi niña, actitudes que le fueron grabadas a la joven en la cabeza y que, bajo la lógica de Vincent, había perdido su capacidad de ser ella misma, por ese motivo no la odiaba, a quien realmente odiaba era a sus padres.

-De hecho iba a enseñarla a nadar, si de momento no me ha hechado es que mi compañia no la ha molestado, her-ma-ni-ta- Mirada de odio~