Desván de la escuela

- Claro, claro -sonríe de medio lado, sabe perfectamete que no es cierto. Pero aún así le corresponde. Acaricia su cuello y cabello en el proceso.

Termina de besarle y baja un poco apoyando una mejilla en su pecho cerrando los ojos.

-Quiero que termine este año ya...

- Eso significa terminar la escuela también ¿No? -continúa acariciándole con cuidado.

-Por eso quiero que termine el año... y que te vengas a vivir conmigo...

- Pero tenemos que terminar el año ¿No? -suspiró, casi resignado. Casi porque no era la clase de persona que se aceptaría resignado por completo.

-Supongo que si... -suspiró frotando la mejilla contra su pecho.

- Claro que si, pero ¡Hey~! ¡No es tan malo! -intentando animarle con su tono de siempre.

-Al menos estas tu... -pero eso no quitaba que quisiera secuestrarle y llevárselo lejos de allí y... echaba de menos Alemania, para que engañarse.

Alzó la mirada al sentir una idea recorrer su mente y tal vez no era el momento pero... no podía dejar pasar una idea tan fantástica como el.

-¿Puedo ponerte un vestido?

- Claro, así no estarás s--- -al escuchar lo segundo, se quedó un momento de piedra, con los ojos bien abiertos. Se sonrojó de golpe, sin saber bien qué responder, o qué decir. ¿E-El Rey de Europa Norte con un vestido, Gilbo? -los labios le temblaron un poco, cada vez sentía las mejillas más y más calientes.

Sonrió ampliamente al verle tan sonrojado y se acerco a su oído lamiendo el lóbulo de su oreja y mordisqueandolo sensualmente.

-No sabes la de cosas que te haría... -pronunció mientras le acariciaba la entrepierna por encima del bóxer.

- Hey, he-hey~, sabes que esa clase de cosas no me quedan -apenas terminó la oración, pudo sentir su mano ahí abajo y estubo a punto de soltar un gemido suave. Entrecerró los ojos y se mordió el labio inmediatamente, apoyando una mano en el hombro de Gilbert por reflejo.

Apartó la mano de allí y dejo de intentar provocarle ante el rechazo del otro. Le besó en los labios con suavidad haciendo que dejara de morderse el inferior.

-Vas a hacerte daño... -tomó la mano en su hombro y besó primero los nudillos con suavidad para luego pasar a los dedos mordiendo con cuidado las puntas de los dedos- No tenias que tratar de apartarme... no iba a obligarte

Miró hacia un lado, frunciendo el ceño de un modo algo esquivo y sin lograr apagar el sonrojo. ¿P-Por qué Gilbert tenía que ser tan lindo? bufó levemente.

- No es que tratara de apartarte -susurró, haciéndose el fuerte y dejando que besara su mano. Se sentían bastante bien esas atenciones sutiles.

-¿que pretendías entonces empujándome por el hombro? kesese~ -alguien tan maravilloso como él no podía equivocarse.

Aprovechando que tenia sujeta la mano del otro frotó su mejilla contra esta cerrando los ojos y sintiendo su tacto para luego soltarla.

- F-Fue sin darme cuenta -infla una mejilla, de verdad había sido sin darse cuenta realmente. Jamás pretendería apartarle ni nada por el estilo.

Una vez fue liberada su mano, la llevó a la nuca del albino y acarició con cariño, jugando con los mechones de su cabello, pero aún sin mirarle.

Suspiró y asintió probablemente había sido así pero prefería equivocarse a pensar que lo hacia sin querer y acabar forzándole.

Le tomó del mentón con suavidad para hacer que le mirara, no soportaba que le evitara.

-¿Que pasa?

-Haha~, no es nada ¿Qué podría pasar? -sonrió, aún con el entrecejo arrugado. Mentía, en parte, pues la verdad era que estaba un poco inquieto (sin razón aparente), pero no lo diría.

-¿Aún duele mucho tu espalda? -no pudo sino preguntar, aún le preocupaba bastante su estado.

-Estoy perfectamente... -le miró con el ceño fruncido, ¿no le había quedado suficientemente claro que sabia cuando mentía?

Respiró hondo y después suspiro tratando de no enfadarse.

-Mathias... deja de mentirme. ¿No confías en mi lo suficiente como para poder contarme que te pasa?

- No es que no confíe en tí -dió un respingo, abriendo bastante los ojos y frunciendo el ceño también mientras sonreía nerviosamente aún- e-es que no lo sé -estaba un poco nervioso, o ansioso, no sabía muy bien.

-Esta bien entonces... pero... si no quieres que te toque solo dilo, no voy a molestarme -cerró los ojos un momento acomodandose sobre el otro, se estaba realmente bien solo asi.

- Oe, no es eso -le acarició suavemente el cabello, mirándole sin dejar la sonrisa de lado, esta vez más casual y brillante como de costumbre. Se quedó un buen rato observándole.

Alzó la vista sonriendo de medio lado.

-Se que soy tan maravilloso que no puedes dejar de mirarme pero es raro... -aunque mucho mas raro era que estando con el danés el haber visto al otro se le hubiera pasado enseguida.

- ... -frunció el ceño un momento, sin deshacer la curvatura de labios- oh, muy bien~, si quieres que deje de hacerlo está bien para mí -apartó las manos y las apoyó ambas en el piso, apartándo la vista pero mirándole de reojo a ratos.

Se dedico a despeinarle tranquilamente hasta que se canso y decidió prestarle atención.

-Me gusta que me prestes atención -le tomó del menton para hacer que le besara y luego se apartó sentandose a un lado.

El beso lo tomó por sorpresa, pero no lo rechazó e incluso respondió a él, girándose a verlo y dándole un beso corto en los labios.

-Me alegra escuchar eso -ladeó una sonrisa, clavándole la mirada- porque tendrás toda mi atención, no dejaré que nadie se te acerque.